miércoles, 8 de junio de 2011



El bulldog francés es una raza de perro pequeña originaria de Inglaterra, establecida a finales del siglo XIX.A pesar de su nombre, América y Gran Bretaña han desempeñado un papel importante en el desarrollo de esta raza, y  también son conocidos o apodados como los “payasos”.
Inicialmente el bulldog francés fue un perro de pueblo, en los cuales los dueños eran carniceros o cocheros, pero,  su carácter y sus payasadas conquistaron rápidamente a la alta sociedad y al mundo artístico, debido a su aspecto original y a su particular carácter.
Su aspecto general es de tipo moloso, tamaño pequeño, pelo corto, musculoso, fuerte y compacto.
Es potente para su pequeña estatura. Para que un bulldog este en buenas condiciones, el peso no debe ser menor a 8 kg, ni mayor a 14kg, ya que su tamaño esta en proporción con el peso.
Tiene el pelo corto, nariz chata, orejas grandes (gran pabellón auricular) y erectas, y cola naturalmente corta (gruesa al principio y anudada al final). El aspecto de este perro debe ser de un animal activo, inteligente, musculoso, de estructura compacta y sólida estructura ósea (la cabeza debe ser muy fuerte, ancha y cuadrada que se caracteriza por una contracción del complejo maxilofacial. La piel forma pliegues y arrugas casi simétricas).
Este perro es ideal para un piso por su pequeño tamaño y porque no ladra sino raras veces. Aunque necesita ejercicio al menos durante 30 minutos diarios no es un perro para  grandes caminatas.
 Es un buenísimo animal de compañía, muy jugueton, activo, afectuoso, payasete,  listo, valiente, muy curioso, sensible, dócil y defensor de su dueño. Le encantan los niños y se muestra tranquilo con los mayores.
Los cuidados a los que se deben someter son mínimo, como son la limpieza de sus orejas y ojos, el cepillado de su pelaje y la limpieza de sus arruguitas.
Es necesario mantener una buena alimentación para que no padezca sobrepeso.
Para más información pueden consultar estos enlaces:

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